La Necia

bola de burros nos dijo en una oportunidad mi abuelita a mis amigos y a mí cuando no supimos contestarle cómo se llamaba a un grupo de burros. para el caso era lo mismo, porque si mal no recuerdo a mi viejita, creo que iba a utilizar la palabra para designarnos. después averigüé y logré saber lo que significaba, pero a estas alturas del partido, ya se me olvidó. creo que la sabia anciana me diría, ¿no dije?

siempre me he preguntado por qué a las personas de poca inteligencia se les denomina burros. entiendo que se les diga así a las personas tercas, que no cambian de opinión, que se mantienen en sus trece porque cuando un burro decide no dar un paso más, ahí te quedas. pero tontos no son; sirven para señalar el camino en lugares en donde no existen rutas y hasta saben esperar su turno para rebuznar, no se interrumpen como los humanos que de tanto querer hacerse escuchar, terminan por no hacerse entender. si nuestros padres de la patria los imitaran, distinta fuera nuestra suerte. ¿se imaginan un congreso lleno de gente como los burritos? puntuales, duros para el trabajo, tercos en conseguir sus metas y cerrados a la corrupción. ah, ¡ya quisieran ésos ser como los burros!

lo que me da coraje es que hasta a los enclenques, si son tontos o no saben algo, se les diga burros cuando estos solípedos son símbolo de fuerza, de energía y vitalidad. claro que las mulas les ganan en esto, pero bah, si no hubiera un burrito hechor, ¿en qué quedarían las muy mulas? yo me quedo con mis burritos, con ellos puedo tener todas las mulas y los mulos que quiero

sin embargo, hay hombres que orgullosamente cuentan que les dijeron “¡eres un burro!” o “¡la tienes como un burro!” y no sé si será casualidad pero en ambos casos, siempre he pensado que es por la cara de zopencos que se manejan, ¿ustedes qué creen?

artículo publicado antes en el Blog El Cuy de Juan Acevedo